87. Las mujeres, a comienzos del siglo 19 llevaban mantillas negras que se colocaban alrededor de la cabeza cuando salían a la calle, dejándola caer, en un gesto de máxima lujuria para esa época, por lo hombros. Era prenda obligatoria para ir a misa. Para las visitas o compras, un sombrero negro las reemplazaba. Las de posición económica inferior, desconocían los cosméticos y su larga cabellera negra la partían por la mitad para caer en dos trenzas hasta la cintura. Sus vestidos eran sencillos, de estampados en algodón. Dentro de sus casas andaban descalzas pero aún así, los cronistas de viajes que llegaban por estas tierras quedaban arrobados hasta el delirio por la hermosura de sus pies.
( * ) Tomado del libro publicado por Diana/ Planeta.