Esta compañía tiene como objetivo realizar versiones coreográficas y escenificaciones de mitos, costumbres, historias, leyendas y paisajes, manteniendo la esencia del hombre argentino. Bajo la dirección del maestro Omar Fiordelmondo, el Ballet Folklórico Nacional de Argentina llega al Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo con el espectáculo EmocionARTE, en el que hace un recorrido a través de diferentes danzas representativas de la cultura gaucha.
El Ballet Folklórico es uno de los grandes representantes del folclor latinoamericano y ha recorrido el mundo con sus vistosas y coloridas coreografías, presentándose en países como Albania, Bulgaria, España, Francia, Portugal, Suiza Brasil, Paraguay, Chile y Japón, entre muchos otros.
La presentación que los colombianos verán en el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo, que la compañía ha bautizado EmocionARTE, inicia con Amanecer Salteño, danza típica en la que desfilan por el escenario aguerridos y orgullosos gauchos de Güemes, recordando a aquellos guerreros que defendieron la Patria. El espectáculo continúa con La cita, que al ritmo de La Zamba del Pañuelo de Cuchi Leguizamón, La Tristecita de Ariel Ramirez y La Telesita de Andrés Chazarreta cuenta la historia de dos enamorados. Luego el turno es para En el monte santiagueño, danza que tiene como protagonistas a un grupo de leñadores o hacheros haciendo su trabajo; uno de los paisanos sueña con la luna dando paso a románticas imágenes. Y la primera parte finaliza con la Danza de las hilanderas, que es una homenaje a estas artesanas que con sus manos crean hermosas piezas típicas.
La segunda parte inicia con una versión de Misa criolla, que recrea una antigua tradición de las fronteras cordilleranas de La Rioja y Catamarca, en a través de la cual recreaban a pasión de Cristo en la semana de pascua. Continúa con Tangos, una maravillosa suite en la que a ritmo de melodías como Negracha Osvaldo Pugliese, Quejas de Bandoneón de Aníbal Troilo y La Cumparsita de Mato Rodriguez, muestran lo mejor de este género que ha conquistado al mundo entero. Y en la parte final presenta tres coreografías: La vendedora de pescado y el tape, una típica escena de los campesinos del litoral argentino; Pericón Nacional de Argentina; y Juegos Pampeanos y Malambo, que cuenta el acontecer de las pulperías de los años 70, en donde se practicaban juegos como J, Carrera de Cuadreras, Juego de Taba, Riña de Gallos y Visteada.
