80. La historia de las corridas de toros y sus sedes en Colombia lleva consigo muchos acontecimientos históricos, muchas bajas y altas que significaron la construcción de espacios para la practica que los españoles trajeron a Latinoamérica. La herencia hispana de tradición taurina tocó a Colombia en el siglo XVI, país latinoamericano conocido en aquel entonces como Santa Fe o Nueva Granada, en donde se celebraban actividades de este tipo cuando se ascendía al trono al Rey de España, cuando entraba un nuevo virrey o cualquier otro acontecimiento de esta naturaleza. Cuando las corridas de toros se prohibieron en España en tiempos de Carlos III, el Virrey de Santa Fe, Pedro Messía de la Cerda instauró corridas en “El aserrío de Fucha” en 1761. La tradición continuó aun después de la independencia, la expulsión definitiva de los españoles no significo un cese de estas actividades.
80. La historia de las corridas de toros y sus sedes en Colombia lleva consigo muchos acontecimientos históricos, muchas bajas y altas que significaron la construcción de espacios para la practica que los españoles trajeron a Latinoamérica. La herencia hispana de tradición taurina tocó a Colombia en el siglo XVI, país latinoamericano conocido en aquel entonces como Santa Fe o Nueva Granada, en donde se celebraban actividades de este tipo cuando se ascendía al trono al Rey de España, cuando entraba un nuevo virrey o cualquier otro acontecimiento de esta naturaleza. Cuando las corridas de toros se prohibieron en España en tiempos de Carlos III, el Virrey de Santa Fe, Pedro Messía de la Cerda instauró corridas en “El aserrío de Fucha” en 1761. La tradición continuó aun después de la independencia, la expulsión definitiva de los españoles no significo un cese de estas actividades.