- ¿Qué hacer para que en Colombia se lea más?
- Crear clubes de comentarios textuales entre los lectores cibernéticos, fortalecer los estudios humanísticos y científicos en las instituciones docentes, reestablecer los suplementos literarios de los diarios, crear tertulias entre intelectuales, para debatir la obra que se considere más trascendente, dándole importancia a la orientación prologar, siempre que el prologuista se haya metido profundamente en el alma del texto de la obra y no a escribir solamente en torno al consabido endiosamiento del autor. La buena critica a fondo, contribuye, desde luego, a que el interés por la lectura se acreciente y se comparta.
- ¿Por qué nos gana la corrupción y la política y no la cultura?
- Porque la cosa nostra colombiana se ha convertido en el primer poder mediático , capaz de manejar el gran negociado de la política y de la cosa pública, contagiando corruptamente a los magnates de la cultura oficial. Por otra parte las instituciones culturales poco apoyan, por la visto, la difusión del libro colombiano o de la obra de arte. Se ha lamentado la desaparición de la editorial Tercer Mundo con el mecenazgo de un presidente poeta que tanto apoyo dio a los autores nacionales. Gracias a Tercer Mundo pude publicar con su apoyo total mi obra antológica titulada: Poesía liberada y deliberada de Colombia (1976). Fue una obra que se agotó en poco tiempo.
- ¿Toda feria del libro debe ser festival para la vida?
- Así se ha tomado: como un festival para vivir leyendo. Y ojalá que los libros que se adquieran en la feria, no sólo nos alegren la mente, sino que nos animen a pensar más positivamente en la Alegría del leer para mayores, hasta alcanzar La importancia de vivircon alegría y amor, a la luz orientadora del humanismo de ayer y el de hoy.
- ¿Los poetas son la savia de nuestra cotidianidad?
- Para mi los poetas más que savia de nuestra cotidianidad son savia de nuestro Canto general y de nuestra Residencia en la tierra, de Poemas humanos, de la poesía pura o impura, de la poesía paradigmática de ayer y de la actualidad, de la cual emanan todos los gustos, todas las savias bien sea lírica, onírica, épica y humanizante. Y la savia de la espiga amotinada sólo se da en tierra de los comuneros como signo de cotidianidad.
- ¿Qué está leyendo?
- He estado leyendo la novela del escritor egipcio Gilber Sinoué, titulado La egipcia, traducida al castellano en 1992. La obra resalta el perfil legendario de la famosa Scheherazada, quien pasa a ser protagonista ficcional de invasiones históricas del territoio egipcio, Dicha célebre mujer me inspira el poema titulado “La egipcia invadida”, que aparece en mi próximo poemario titulado: La primavera árabe y el trasluz de la egipcia abanderada.