Por: Kairos/ Ediciones Urano Colombia. ¿Es cierto que convivir con un animal nos aporta salud y felicidad? ¿Qué podemos aprender de la investigación biomédica con ratones? ¿Cuál de los dos disfruta de una vida mejor: el pollo que nos comemos para cenar o el gallo que muere peleando en el reñidero? ¿Por qué está mal comernos al perro que vive en casa?
Basándose en las investigaciones que lleva a cabo desde hace más de dos décadas en el nuevo campo de la antrozoología –la ciencia que estudia las relaciones entre las personas y los animales–, Hal Herzog nos ofrece respuestas sorprendentes a estas y a otras preguntas en torno a los enigmas morales a los que nos enfrentamos cotidianamente en relación con los animales. “Muchos de los temas que abordo en este libro son controvertidos. Por ejemplo, los investigadores discrepan sobre si los perros se sienten o no culpables cuando se hacen caca en la alfombra del salón; sobre si los niños que insultan a los animales se van a convertir de mayores en personas violentas; y sobre el papel que el comer carne ha tenido en la evolución de la humanidad. Las pasiones del público se desatan cuando abordamos ciertos temas relativos a los animales, por ejemplo si tener un pitbull debería estar prohibido o si intentar descubrir un remedio para el cáncer vale la muerte de millones de ratones todos los años”, afirma Herzog. El autor insiste que con este libro su objetivo no es cambiar la mentalidad del lector en cuanto a cómo deben tratarse los animales, sino animarle a pensar más profundamente sobre la psicología y las implicaciones morales de algunas de nuestras relaciones más importantes: las que establecemos con los seres no humanos con los que compartimos nuestra vida.
Herzog combina la antropología, la economía del comportamiento, la psicología evolutiva y la filosofía, y con todas estas disciplinas teje una narrativa impecable amenizada con anécdotas de la vida real e investigaciones científicas y con su propio sentido de la ambivalencia moral.
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