El AGN, entidad adscrita al Ministerio de Cultura, le entrega a la ciudad de Santa Marta y al país, un valioso patrimonio documental de los años 1788 a 1907, restaurado y digitalizado con el apoyo de la Gobernación del Magdalena.
En el marco del Mes del Patrimonio Cultural, ‘Reconoce y vive tu patrimonio’, y en aras de la recuperación del patrimonio documental de la nación, el Ministerio de Cultura, el Archivo General de la Nación y la Gobernación del Magdalena hicieron entrega, este lunes 12 de septiembre en Bogotá, de parte del Archivo Histórico del Magdalena Grande, para el disfrute de toda la comunidad. En el marco de la política de preservación del patrimonio documental, se restauraron y digitalizaron los 99 primeros tomos de la Notaria Primera de Santa Marta.
Es importante considerar que el acervo documental de este Archivo histórico está compuesto por documentación de tres de los departamentos de la Región Caribe: Guajira, Cesar y Magdalena, y alberga un aproximado de 1.600 metros lineales de documentación.
En el proceso de recuperación de este valioso Archivo, se seleccionó para una primera fase de intervención (2015-2016), los protocolos notariales por ser los documentos más antiguos que custodia, que datan desde 1788 a 1907. Entre estos documentos vale mencionar que se encuentran escrituras de venta de bienes inmuebles, de compra-venta y de libertad de esclavos, de protesta contra mar y viento, el reconocimiento de hijos naturales, los matrimonios civiles e hipotecas, entre otros.
La recuperación
Tratamientos de limpieza superficial para retirar el polvo y suciedad acumulada durante años, desinfección para inactivar el biodeterioro, hidratación del soporte, eliminación de materiales agregados (cintas, elementos metálicos), ubicación de fragmentos, refuerzos estructurales, son algunos de los procesos que se realizaron folio a folio en el laboratorio de conservación y restauración del Archivo General de la Nación, con materiales compatibles con las características de los documentos para recuperar su estabilidad física y estructural.
“Procesos de restauración en los que, a partir de criterios muy definidos y respetuosos con la documentación, historiadores, restauradores, encuadernadores, biólogos, químicos y técnicos en digitalización, pusimos nuestros conocimientos técnicos y científicos y también el alma, para darle sentido a cada fragmento de papel encontrado”, dijo la restauradora de bienes muebles, Martha Luz Cárdenas, líder del proceso técnico.
El proyecto de intervención contempló entre otras actividades, la restauración de aquellos protocolos que de acuerdo con diagnósticos previos, se encontraban con mayor deterioro. Se adelantó el saneamiento de los espacios de depósitos y monitoreo de las condiciones ambientales, procesos que se realizaron en la ciudad de Santa Marta con el fin de tomar las medidas necesarias que garanticen la conservación definitiva de la documentación restaurada y del resto del Archivo Histórico del Magdalena Grande.
