Bogotá.
Cuerda y arco, el lirismo del ‘chelo’
Solistas de reconocimiento internacional, tocarán un repertorio de lujo que incluye algunos de los periodos más importantes la música clásica. Por primera vez, la Orquesta Filarmónica de Bogotá, será dirigida por el músico alemán Henrik Schäfer, director musical de la Ópera de Gotemburgo de Suecia, y quien fue asistente del desaparecido Claudio Abbado.
La batuta de Schaefer ensamblará la Orquesta con el violonchelista Leonard Eischenbroich, el solista invitado a tocar el Concierto para cello en mi menor, op. 85 del compositor Edward Elgar. Eischenbroich es otro artista alemán, destacado por su juventud, carisma y talento, características que han conquistado los escenarios más importantes del mundo. El Concierto para cello fue escrito justo después de la Primera Guerra Mundial, pero llamó la atención del mundo musical, solo entrada la década de 1960.
Las presentaciones incluyen la suite orquesta Hemlet y Ofelia del compositor William Walton y la Sinfonia No 7 en mi mayor (WAB 107) de Anton Bruckner, uno de los compositores más innovadores de finales del siglo XIX. Esta última obra fue escrita por Bruckner en el mismo año de fallecimiento de Richard Wagner.
¿Dónde y cuándo?
Auditorio León de Greiff de la Universidad Nacional, viernes 17 de junio, 3 p.m. (entrada libre), sábado 18 de junio, 4 p.m. con boletería (en la taquilla o en tuboleta.com).
Leonard Eischenbroich (Violonchelo)
Nacido en 1985 en Frankfurt, Leonard Eischenbroich recibió una beca a los diez años para estudiar en la Yehudi Menuhin School en Londres. Más tarde estudió con Frans Helmerson en la Academia de Música de Colonia. En 2012 se convirtió en el mentor artístico de la Orquesta Filarmónica de Bolivia, primera orquesta nacional de ese país. Su compromiso con esa orquesta lo ha llevado de regreso a Bolivia en varias ocasiones, donde ha adelantado proyectos educativos, y ha facilitado las visitas de solistas y directores internacionales en La Paz.
Henrik Schäfer (Director)
A la edad de 22 años, Henrik Schäfer, se unió a la Filarmónica de Berlín como violista y miembro más joven de la reconocida orquesta. En el año 2000 fue elegido por Claudio Abbado como su asistente. Su propia carrera como director comenzó con una producción del ballet La consagración de la primavera con el Ballet de Leipzig y con Gewandhausorchester. En 2007 fue elegido como director titular de la Wermland Opera en Suecia después de una producción de Parsifal. Allí se ganó el reconocimiento internacional con la totalidad del ciclo los Anillos del Nibelungo de Wagner, con cuatro óperas estrenadas en la misma semana.
